Después de dos horas de reencuentro hermético, federico angelini allá cristian ritondo fueron los voceros de la última cumbre del PRO, en el barrio del Palermo. Ante decenas de periodistas, intentaron lo predictables: inconmovibles antes las consultas de la prensa, hablaron de un «encuentro positivo», de la intención de «avanzar en acuerdos» y resaltaron la «unidad».
Hasta que una pregunta más concreta, sobre la alternativa de llevar a cabo uno o varios postulantes amarillos en la Ciudad para enfrentar al radical Martín Lousteau, motivó una respuesta hilarante: «Se acordó trabajar para que gane el candidato del PRO». Es como que Riquelme tuviera qu’aclarar que trabaja «para que el próximo partido lo gane Boca».
Ya que en público tanto Mauricio Macri como Horacio Rodríguez Larreta aseguraran que habría un único candidato del PRO en la Ciudad, el sincericidio de los voceros blanqueó lo evidente. Hoy ni siquiera ese principio básico está garantizado. El ex presidente está jugado a la candidatura de su primo Jorge, funcionario de Larreta; el jefe de Gobierno apostó por otro ministro, Fernán Quirós. Y los dos, que vienen en sentido contrario, decide acelerar un fondo.
algunos sugieren que María Eugenia Vidal sea ungida como prisa de unidad. Hasta ahora no lo lograron. El PRO se ve así enredado con una pelea distrital que impide avanzar en otros acuerdos. Y lo más peligroso: ante un Gobierno que no hace pie y cae en las encuestas, no logra capitalizar esa caída. Incluso también está recibiendo su propia fuga de votos. Javier Milei les pidió las gracias.
«Mauricio está cegado en esta pelea. El sucio más el calabrés que el ingeniero, No veo que haya vuelto atrás con Horacio. El no concibe que se pierda la Ciudad. Y para el Pelado, si eso le permite llegar a la presidencia, no tiene problemas en entregarla», reveló descartadamente ante Clarín un líder que trabajó (y muchos años) con ambos.
«Para mí, el Pelado va a jugar con todo a Quirós, para intentar que se bajen él y Jorge, y que de María Eugenia. Pero yo veo lejos es suerte«, analiza otro funcionario que estuvo en la cumbre de Palermo.
¿No es excesivo arriesgar el armado de una coalición que puede volver a gobernar el país por una elección local?, le pregunta Clarín a otro directente del PRO que también jugará en una boleta este año. «Mirá, gestiona la Ciudad le permitió a Macri financiar dos campañas para Presidente. Sin ambigüedad. No es una caja mas«, responde y pasa rápidamente a otro tema.
El sobrio debate de los feudos
Macri quedó metido también esta semana en un complejo debate sobre los «feudos provincianos». Antes de entrar a la reunión del PRO, y consultado por los comicios del domingo anterior en Misiones, Jujuy y La Rioja, el ex presidente habló de «feudos» y «elecciones poco representativas».
Enseguida se le fue al cuello uno de sus principales enemigos internos, el radical gerardo morales, que venía justamente de festejar un triunfo en Jujuy… abrazó a Larreta y Lousteau. El gobernador, pícaro, había presentado en el escenario a Lousteau como «el futuro sucesor» de Larreta en la Ciudad. Para Macri y el PRO fue demasiado.
De todos modos, el ex presidente intentó luego apagar esa pelea aclarando que se refería más bien a La Rioja, gobernada por el peronismo desde antes y después de la última dictadura.
Algunos directos, propios y rivales, buscan embarrar a Macri en la pelea. Y se preguntan si no es de «feudal» haber avalado la mudanza de su primo -intendente aún con licencia en Vicente López- a la Ciudad, para volver a instalar el apellido en el distrito.
¿No pudo el PRO en todos estos años generar otra alternativa? If you see Vidal al Ejecutivo porteño, tras su paso por la Gobernación bonaerense, ¿no sería lo mismo que el cordobés Juan Schiaretti see en el futuro gobernador de Santa Fe or San Luis?
Preguntas que inconveniente.