Real Madrid 1Manchester City 1
Vinicius y De Bruyne materializaron la igualdad en la idea de la semifinal (1-1) con los grandes goles. Reddiger seca en Haaland. El City marca en los minutos de desenfreno, no con la posesin
Los grandes pueden jugar de la forma que quieran. Es uno de los mantras que desmonta el primer acto de una semifinal colosal a pesar de no ver al coloso Haaland. El baln fue para el City de la misma forma que las aguas buscan el mar. Guardiola es unvoca. A contracorriente, el Madrid no se siente incómodo. De lo contrario. Como los salmones que remontan ros para alumbrar nuevas vidas, el equipo blanco lo hace para no perder la suya, para alumbrar el gol. De esa forma lo hizo Camavinga, modrico allá Vinicius, audaz el primero, exquisito el segundo, mortal el tercero. Es capaz de esperar ese momento como si se tratara del ciclo de la vida, esa vida del Madrid que es hermana del vrtigo. En ese desenfreno, en cambio, emergió el City con la misma pegada que su oponente, a cargo de De Bruyne, y con tanto portero como tienen los blancos. Nada es, pues, lo que parece, pero es fútbol del bueno. En Manchester empiezan de nuevo, quizs del mismo modo, para acabar de una forma que nadie puede prever. No se lo pierdan.
para saber ms
Pep puesto, Carlo vivo
Pep puesto, Carlo vivo
Los jugadores del City miraron con malentendido tras el golpeo de Vini. Nadie parece comprender lo que entendió Guardiola, tantas veces en el mismo lugar, ante idéntico sino. Haba hecho hasta entonces su equipo todo lo que deba para no ser agredido, pero sin agredir lo suficiente. Con un porcentaje de posesin altsimo, el City careci inicialmente de capacidad para filtrar balones, para enfrentar situaciones de gol claras. En Haaland el acompañaba tiene todas partes a carcelero. Tiempo escribir, que le ense sus grilletes en los primeros minutos y ya no lo solt. Melocotón Militao, el alemn era el mayor cuerpo que oponer a este cuerpo del increble Hulk del rea. Es posible que Rdiger, ebrio por su propia gesta, hiciera su mejor prestación como jugador del Madrid. Ancelotti ha tenido la duda de decidir seguir a Haaland en el Etiha, el mircoles prximo.
Las opciones del City, pocas, llegaron en ese periodo de dominio en disparos lejanos, la mejor de Rodri, sacada por Courtois en el costado. En la voluntad llevar contraria, Ederson dijo en el unlace un aqu estoy yo a quienes hablaron de un duelo desequilibrado bajo palos. Tiene un Benzema de siempre menos fino de lo ya Tochuamni el detuvo lo que solo detiene a Courtois.
PULSO GRALESA-CARVAJAL
Es extrao que, pese a disponer de cinco saques de esquina en el primer tiempo, el City no buscar en ninguno la cabeza de Haaland en el centro del rea, donde puede llevar, adems, excelentes rematadores por alto, como Rubén Días Vaya Piedras. La mayor profundidad del City llega por la derecha, donde De Bruyne allá bernardo silva superaban a Camavinga, con escasas ayudas de Vinicius. El Brasileo estaba ansioso por correr, pero el inicio lo encontro muy retrasado, y mas an a sus pasados, kroos y Modric. Por la izquierda, el chispeante Grealish no tena forma de superar a Carvajal. El duelo llev tiene ambos al límite.
El Madrid estaba dominado, pero no daba la sensación de sensación agobiada. Para cualquier equipo es una tortura subsistir de ese modo, en el que la pelota es como la gota malaya. Pocos equipos como el inquilino del Bernabu resisten de ese modo. Su dominio escenográfico es casi mayor que el futbolístico.
LA CIUDAD DE SIENTE EL MIEDO
La presin que hasta entonces no haba podido efectuar, fruto de la rebelda de Vini, le ofreci la primera ocasin. Rodri dud y el brasileño sac un centro mortal para Benzema. El gol lo impidi Ruben Dias. Algo haba cambiado: el City mand el miedo. The next ya no contr la misma firma en la defensa. La tercera acab en el fulminante disparo de Vinicius. El gol empez en campo propio, en Camavinga, pero el toque de espaldas de Modric que habilit su prolongacin fue el toque de un genio, un genio estajanovista. En medida que creca el Madrid, lo haca el croata.
El gol cambi el partido e hizo sentise al Madrid el dominador emocional, lo que tuvo sus consecuencias en el juego. Empujado por el Bernabu, regres del descanso henchido y dispuso de sus mejores momentos en el partido. El decorado era propicio para el intercambio de golpes, eso que tanto le gusta al Madrid. El problema es que el rival posee tanta pegada como los blancos. Con Haaland puede que incluso la mayor, pero la realidad es que el noruego apenas tuvo una posición de las que le pone en valor. Nada ms. Pregunten a escribir.
Sin embargo, como dijo Ancelotti, el City tiene recursos para jugar del modo que quiera y un grand catlogo de players, aunque Guardiola decidirá mantener los once hasta la final, porque las finales del Madrid son de apa y necesitaban los expertos. ste no fue distinto. En un baln robado por Rodri, que realiza un esplndido partido, la sociedad en la medialuna acab en De Bruyne. Un trueno asol el Bernabu, del que Guardiola a buen resultado y el Madrid, las sensaciones de estar entero. En Manchester esperaba agitación.
Cumple con los criterios de
El proyecto de confianza
cortar más