A fuerza de batir récords de precocidad, Carlos Alcaraz ya no es una incongruencia. El delfín de Novak Djokovic, el número 1 más joven del mundo desde la creación del ranking ATP -a los 19 años, 4 meses y 6 días, gracias a su victoria en el US Open, a principios de septiembre de 2022- tiene garantizado conseguir volverá al primer escalón del podio el 22 de mayo, al día siguiente del torneo de Roma… que nunca antes había disputado. Participa a partido único en este Masters 1000, donde entra en competición El sábado 13 de mayo ante su compatriota Albert Ramos-Vinolas, le basta para que automáticamente pase por delante del serbio, que le había destronado gracias a su derrota en semifinales del torneo de Miami a principios de abril.
El español continúa con su espeluznante comienzo de temporada, producido tarde debido a una lesión en la pierna derecha que lo descartó del Abierto de Australia. Desde entonces, el balance del prodigio de El Palmar (Murcia) se reduce a dos derrotas por veintinueve victorias. Con cuatro títulos más (en cinco finales) en su vitrina, que ahora suma diez. Incluso antes del epílogo en el Foro Itálico, es con el dorsal de favorito que se presentará en Roland-Garros (28 de mayo-11 de junio), mientras su glorioso compatriota Rafael Nadal sigue dudando de sus posibilidades de ganar el poder. y defender hijo 14mi título.
Tras Buenos Aires, Indian Wells y Barcelona, en Madrid el 7 de mayo retuvo el título adquirido el año pasado, su cuarto en Masters 1000. Aunque fuera con dolor. Golpeado en la clasificación y luego reclutado, el alemán Jan-Lennard Struff no se fue lejos del atraco de la década, tras haber detectado algunos fallos en un intento de desestabilizar a su hermano menor, que el 5 de mayo cumplió 20 años.
«Incluso Federer, Nadal y Djokovic no fueron tan completos»
«Si tiene tiempo, si puede organizarse, es demasiado bueno, así que traté de quitarle tiempo. reveló el que entonces tenía 65 añosmi en todo el mundo (desde entonces se ha movido hasta el 28mi lugar). Carga muy atrás de su línea en la devolución, así que pensé que quería devolver la pelota para comenzar la jugada y logré evitarlo yendo a la red. Siento que disminuyó su calidad a cambio. »
La estrategia para pagar en el segundo set. Alcaraz se vio sacudido como nunca desde el inicio de la temporada europea en tierra, pero su musculoso brazo no tembló mucho (6-4, 3-6, 6-3). Inmediatamente recitó su pequeño resumen de tenis, un juego sin puntos débiles aparentes y lleno de garbo. A gusto tanto en defensa como en ataque, el diestro ya sabe hacer de todo: correr a la red, lanzar drop shots (su lindo pecado) o globos milimétricos, ajustar sus planes tácticos según el rival…
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