El Festival de Eurovisión está envuelto en polémica. La ciudad anfitriona del evento, Malmö, en Suecia, está repleta de carteles en contra del antisemitismo, así como de letreros y banderas a favor del fin de la guerra de Gaza y “la liberación de Palestina”. “Nunca imaginé que nos convertiríamos en un acontecimiento político mundial”, señala una dirigente local. Cientos de personas se han concentrado esta semana en Malmö para manifestarse en contra de la participación de Israel y llaman al boicot, mientras que el organizador del evento, la Unión Europea de Radiodifusión, asegura que no puede censurar a Israel por motivos políticos. Este es el reportaje principal de la nueva entrega de ARTE Europa Semanal, el programa informativo producido por Arte que emite cada semana EL PAÍS y que se puede ver en el vídeo de esta noticia.
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